Como un ciempiés
vestido de astronauta
meando sobre un cartel de compro oro
en un callejón oscuro.
Así me siento muchas veces.
Luego se me pasa
y recuerdo que soy una ardilla
en un vertedero
bebiendo Chateau Latour del 57
a morro.
Y luego eructo y se me pasa
y recuerdo que soy un pez
que no recuerda
dónde dejó aparcada la moto.
27 abr 2015
19 abr 2015
Los cobardes como yo
Los cobardes como yo
se suicidan lentamente,
vaso a vaso,
letra a letra,
con parsimonia,
con alevosía,
con la satisfacción del beber cumplido,
con la cama sin hacer.
Los cobardes como yo
se suicidan por sobredosis,
por acumulación
de mañanas siguientes.
se suicidan lentamente,
vaso a vaso,
letra a letra,
con parsimonia,
con alevosía,
con la satisfacción del beber cumplido,
con la cama sin hacer.
Los cobardes como yo
se suicidan por sobredosis,
por acumulación
de mañanas siguientes.
Quién lo iba a decir
Parecía una persona normal.
Saludaba en el ascensor,
era amable y tranquila...
Quién iba a pensar
que por las noches su personalidad
se desquiciaba,
que derramaba tinta inocente
hasta llegar al extremo de apuñalar la soledad
con su bolígrafo.
Con cierta gente nunca se sabe.
Saludaba en el ascensor,
era amable y tranquila...
Quién iba a pensar
que por las noches su personalidad
se desquiciaba,
que derramaba tinta inocente
hasta llegar al extremo de apuñalar la soledad
con su bolígrafo.
Con cierta gente nunca se sabe.
Oda a un grano en el culo
Al sentirme lo senté,
y enseguida lo palpé.
Y al palparlo tuve un pálpito.
Así proclamé en un púlpito:
ni los pingües privilegios
ni las mesuras, los estrépitos
ni los más caros colegios
te salvan
en salva la parte
(ni en los culos más egregios)
de encontrarte un grano avieso
en esa parte de la piel
(ni lavando con Ariel
los gallumbos con exceso)
o de tornarte en un infiel,
en un absceso
cruel, contumaz, obseso
para este prójimo o aquél.
Sólo en tu deceso
cuando sólo seas hueso,
podrida ya la piel,
acabará el pesado peso
de ese picor en tu obeso
culo de tonel
o dejarás de ser un sieso,
un grano, un estorbo, un divieso
una ladilla de burdel.
¡Adiós pues, grano sin seso,
adiós, mundo cruel!
y enseguida lo palpé.
Y al palparlo tuve un pálpito.
Así proclamé en un púlpito:
ni los pingües privilegios
ni las mesuras, los estrépitos
ni los más caros colegios
te salvan
en salva la parte
(ni en los culos más egregios)
de encontrarte un grano avieso
en esa parte de la piel
(ni lavando con Ariel
los gallumbos con exceso)
o de tornarte en un infiel,
en un absceso
cruel, contumaz, obseso
para este prójimo o aquél.
Sólo en tu deceso
cuando sólo seas hueso,
podrida ya la piel,
acabará el pesado peso
de ese picor en tu obeso
culo de tonel
o dejarás de ser un sieso,
un grano, un estorbo, un divieso
una ladilla de burdel.
¡Adiós pues, grano sin seso,
adiós, mundo cruel!
Miles de millones
aminoácidos formando proteínas
levaduras en el barro colonizando otros barros
millones de bacterias en una gota de agua
millones de ácaros en una brizna de hierba
el 6 lleno hasta los topes
embotellamiento en la ronda este
millones de bípedos con mamas y pelo
moviéndose al azar
una placa de petri llamada tierra
un cultivo llamado humanidad
la vida no tiene dirección
¿cómo iba a tener un sentido?
levaduras en el barro colonizando otros barros
millones de bacterias en una gota de agua
millones de ácaros en una brizna de hierba
el 6 lleno hasta los topes
embotellamiento en la ronda este
millones de bípedos con mamas y pelo
moviéndose al azar
una placa de petri llamada tierra
un cultivo llamado humanidad
la vida no tiene dirección
¿cómo iba a tener un sentido?
14 abr 2015
De esos días tontos
cometo errores a sabiendas
(a mala leche)
olvido el paraguas en mitad del aguacero
(aunque luego voy a por él)
piso en todos los charcos
(con premeditación)
voy por la parte larga del trayecto
(porque me da la gana)
saludo a las señoras
(algunas se me asustan)
dibujo borratajos
(emulando a mi sobrina)
me río de mis chistes malos
(me miran raro)
y pirateo películas de la red
(soy un chico muuuy malo)
Hoy tengo uno de esos días tontos:
poeta perdido,
tonto perdido,
día ganado.
(a mala leche)
olvido el paraguas en mitad del aguacero
(aunque luego voy a por él)
piso en todos los charcos
(con premeditación)
voy por la parte larga del trayecto
(porque me da la gana)
saludo a las señoras
(algunas se me asustan)
dibujo borratajos
(emulando a mi sobrina)
me río de mis chistes malos
(me miran raro)
y pirateo películas de la red
(soy un chico muuuy malo)
Hoy tengo uno de esos días tontos:
poeta perdido,
tonto perdido,
día ganado.
12 abr 2015
Qué error
Qué error cometieron los humanos
en la antigüedad
sustituyendo a las deidades femeninas
por dioses masculinos.
En una diosa se cree
de una forma compulsiva.
en la antigüedad
sustituyendo a las deidades femeninas
por dioses masculinos.
En una diosa se cree
de una forma compulsiva.
Ayer me llamaste
Soy un lobo bueno que va de malo.
Un día fui valiente y
te envié un prohibido el paso.
Ese día fui un cobarde y
te escondí en un desván de la memoria.
Soy un lobo malo que va de bueno.
Ayer me llamaste
y sé porqué, porque soy un lobo viejo.
y tú eres la loba mala que va de buena.
Te sentías sola, querías hablar conmigo,
eso era verdad.
En eso siempre fuiste una loba sincera
y yo un lobezno muy tonto.
Un día fui valiente y
te envié un prohibido el paso.
Ese día fui un cobarde y
te escondí en un desván de la memoria.
Soy un lobo malo que va de bueno.
Ayer me llamaste
y sé porqué, porque soy un lobo viejo.
y tú eres la loba mala que va de buena.
Te sentías sola, querías hablar conmigo,
eso era verdad.
En eso siempre fuiste una loba sincera
y yo un lobezno muy tonto.
8 abr 2015
El lucero de tus poemas
¿Sabías, poeta, sombra enamorada,
que el lucero al que cantaste
en tus poemas
no es más que un cuerpo planetario
que dista más de sesenta millones
de kilómetros
de La Tierra
(Venus se llama, para más señas)
y que además es un infierno
donde el plomo se derrite
a temperatura "ambiente"
y a veces llueve ácido sulfúrico?
Lo sabías, seguro,
pero preferiste seguir
haciendo poesía.
Y no te culpo.
Alabo tu inclinación por el romanticismo.
Aunque yo a veces prefiero la épica
de la realidad que quema.
Como todo, es cuestión de gustos.
que el lucero al que cantaste
en tus poemas
no es más que un cuerpo planetario
que dista más de sesenta millones
de kilómetros
de La Tierra
(Venus se llama, para más señas)
y que además es un infierno
donde el plomo se derrite
a temperatura "ambiente"
y a veces llueve ácido sulfúrico?
Lo sabías, seguro,
pero preferiste seguir
haciendo poesía.
Y no te culpo.
Alabo tu inclinación por el romanticismo.
Aunque yo a veces prefiero la épica
de la realidad que quema.
Como todo, es cuestión de gustos.
A veces me pregunto
A veces me pregunto
de dónde le salen a uno las palabras
y por qué te gustan cada vez más
las más simples e inocentes
como
globo
patata
rinoceronte
amigo
o pelota
y no esos engendros que te asaltan
cuando menos te lo esperas,
sobre todo
si a uno se le supone leído
(verbigracia, vivido):
terapéutico
impostado
arrepentimiento
melífluo
o vetusto.
O silente.
A veces me pregunto
por qué el lenguaje
envejece con la edad.
Y porqué hoy me siento tan viejo.
de dónde le salen a uno las palabras
y por qué te gustan cada vez más
las más simples e inocentes
como
globo
patata
rinoceronte
amigo
o pelota
y no esos engendros que te asaltan
cuando menos te lo esperas,
sobre todo
si a uno se le supone leído
(verbigracia, vivido):
terapéutico
impostado
arrepentimiento
melífluo
o vetusto.
O silente.
A veces me pregunto
por qué el lenguaje
envejece con la edad.
Y porqué hoy me siento tan viejo.
6 abr 2015
Yo estuve en La Gran Migración de Las Patatas Marcianas
Yo estuve en La Gran Migración de Las Patatas Marcianas.
Yo he contemplado el suicidio colectivo
de los Entes Inmortales.
He cabalgado en un penacho de diente de león
hasta la Nebulosa del Cangrejo.
Cuando retiraron todo el queso de la superficie de la luna
y la empedraron, yo estaba allí.
Cuando unos ratones encargaron la construcción
de la actual Tierra, yo estuve allí.
Enciendo la radio por la mañana
y escucho las noticias.
Quiero estar en cualquier sitio,
menos aquí.
Yo he contemplado el suicidio colectivo
de los Entes Inmortales.
He cabalgado en un penacho de diente de león
hasta la Nebulosa del Cangrejo.
Cuando retiraron todo el queso de la superficie de la luna
y la empedraron, yo estaba allí.
Cuando unos ratones encargaron la construcción
de la actual Tierra, yo estuve allí.
Enciendo la radio por la mañana
y escucho las noticias.
Quiero estar en cualquier sitio,
menos aquí.
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